“CHUPETE ¿ES RECOMENDABLE?”
PUBLICADO: Revista Pediátricas Pediatrialdia. Octubre 2006.
AUTOR: Doctor R. González.
INTRODUCCIÓN:
- El chupete es uno de los componentes que se estrenan desde las primeras horas o los primeros días.
- La succión no nutritiva de dedos, chupete y otros objetos no relacionados con la ingesta de nutrientes se considera una actividad normal en el desarrollo fetal y neonatal.
- Se inicia en el útero y persiste hasta los 12 meses de edad.
- Este reflejo de succión permite al recién nacido alimentarse y sobrevivir y además le calma y le conforta.
BENEFICIOS DEL USO DEL CHUPETE:
*Efecto tranquilizante del chupete.
- En los primeros días de vida se aconseja amamantar al recién nacido a la autodemanda para aportarle la cantidad de alimento correcta.
- El pequeño tiene la necesidad de repetir con frecuencia la succión del pezón materno o sustituirlo por su propio pulgar o por el chupete.
- NO debería ofrecérsele hasta que la lactancia materna estuviera bien establecida, en 2 o 3 semanas.
- Durante la lactancia la madre no puede ofrecerle continuamente el pecho, por ello se recurre al chupete.
- Recurso de gran ayuda en niños con cólicos y muy irritables, en embarazos múltiples o en puerperios.
- Los niños alimentados con leche adaptada no deben usar el biberón para satisfacer su deseo de succión, ya que podría sobrealimentarse, mejor recurrir al chupete.
- El chupete puedes ser útil como relajante, pero debe evitarse utilizarlo cada vez que el niño llore.
*¿Pulgar o chupete?
- La succión del pulgar se asociaba a mayor número de deformidades dentarias, en la actualidad se observa la misma frecuencia.
- El pulgar no se pierde durante la noche ni se cae continuamente al suelo convirtiéndose en objeto contaminado.
- El uso del pulgar es regulado por el niño, quien decide cuando desea succionar y aprende a tranquilizarse el solo.
*Prevención del síndrome de muerte súbita del lactante.
- Se ha relacionado el uso del chupete con una menor incidencia del síndrome de muerte súbita del lactante.
- Es un posible mecanismo de impedimento de que la lengua caiga hacia atrás obstruyendo las vías respiratorias.
- La succión del chupete favorece el control de la respiración disminuyendo los períodos de apnea a la vez que, por razones de comodidad, los niños que usan el chupete no duermen en decúbito prono, posición que aumenta el riesgo de síndrome de muerte súbita.
* Estímulo del recién nacido pretérmino.
- Facilita una transición más rápida a la alimentación oral.
- Estos niños presentan menor tiempo de tránsito intestinal y una mayor ganancia ponderal que supone estancias más breves y menos costosas.
RIESGOS DEL USO DEL CHUPETE:
*Malformaciones dentarias: maloclusión.
- Los hábitos de succión no nutritiva se han relacionado con las maloclusiones dentarias;
- Mordida abierta anterior: es la maloclusión más frecuente y tiende a mejorar al abandonar el chupete.
- Mordida cruzada posterior: es la más grave y permanente, que puede repercutir en el crecimiento craneofacial.
- Tal relación se debe a que la posición bucal del chupete conlleva un desplazamiento de la lengua sobre la mandíbula y una elongación de los músculos orbiculares y buccinador.
- Provocan un aumento de la distancia transversal mandibular y una disminución de la distancia transversal maxilar.
- Los niños succionadores, sufren una alteración de la flora bacteriana y una hipertrofia del sistema linfático por lo que suelen presentar una respiración bucal.
*Otitis media aguda.
- La utilización del chupete constituye un factor de riesgo de otitis media aguda.
- Hace que el niño con una infección de vías respiratorias altas sea más susceptible a la otitis media aguda.
- La succión frecuente del chupete puede ser perjudicial para el buen funcionamiento de la trompa de Eustaquio.
- El chupete debería restringirse a los primeros 10 meses de vida, cuando la necesidad de succión es mayor y la otitis media aguda infrecuente.
*Relación con el cociente intelectual.
- El efecto relajante del chupete, provocará una disminución del interés del pequeño por su entorno y de los estímulos por parte de los padres, que podría explicar un CI inferior en los niños que han abusado del chupete.
*Duración breve de la lactancia materna.
- El uso del chupete se relaciona con una duración más breve de la lactancia materna.
- El recién nacido que usa chupete presenta una “confusión de pezón”, ya que la succión del chupete requiere un patrón de succión distinto que puede interferir en la adquisición de la técnica oral necesaria para la lactancia materna.
- También puede interferir en la producción de leche materna y en el crecimiento del lactante.
- El lactante que utiliza chupete, estimula durante menos tiempo el pezón materno, número menor de tomas y menor la producción de prolactina.
- Se reduce el tiempo que dura cada toma de modo que el lactante no ingiere la leche final, rica en grasas y calorías.
- La leche obtenida pierde en calidad y en cantidad, dejando insatisfecho al lactante.
- Las madres que estimulan el uso del chupete presentan rasgos conductuales y socioculturales peculiares.
- El chupete parece contribuir a un destete más precoz en el grupo de mujeres que se encuentran incómodas con la lactancia materna.
*Reflujo gastroesofágico.
- La succión no nutritiva puede aumentar o disminuir la frecuencia o duración de los episodios de reflujo gastroesofágico.
- El uso del chupete en decúbito prono aumenta el RGE posprandial debido al descenso del tono del esfínter esofágico.
- Se recomienda que los niños afectados de RGE patológico eviten el chupete en posición prono.
*Síndrome del biberón o del chupete.
- Es la presencia de poli caries en la dentición provisional debida a la utilización prolongada del biberón o chupete lleno o impregnado de productos azucarados.
- Los incisivos maxilares son los primeros en afectarse, seguidos de los molares maxilares.
- Pueden aparecer infecciones locales y generales, malformaciones dentarias, trastornos en la alimentación con la consecuente afectación del desarrollo pondoestatural y fragilidad de las piezas dentarias permanentes.
- Los padres deben instaurar la higiene dentaria desde la aparición de los primeros dientes y de evitar los malos hábitos alimentarios y de succión.
*Úlceras orales palatinas de etiología traumática: afta de Bednar.
- Es una úlcera oral de gran tamaño localizada en el tercio posterior del paladar, debida al efecto traumático de la tetina del biberón durante la lactancia y/o el uso intenso de chupetes no ortodóncicos.
*Accidentes infantiles.
- El borde relativamente cortante del escudo rígido de un chupete puede ocasionar laceraciones faciales nasales.
- El colgar el chupete mediante una cuerda alrededor del cuello del niño, puede provocar de forma accidental la estrangulación del pequeño.
- La aspiración de una parte del chupete, con la consiguiente obstrucción de las vías respiratorias, asfixia y muerte del niño.
- Mayor riesgo cuando se usan chupetes de varias piezas.
*Chupete ideal:
- Chupete de una pieza Escudo protector adecuado.
- Escudo semirrígido.
- Escudo con agujeros antiahogo.
- Anillo para tracciónarlo.
*Contaminación química.
- Se ha detectado la presencia de nitrosaminas y sus precursores en algunas tetinas de goma.
*Hipersensibilidad al látex.
- Han surgido algunos casos de lactantes que utilizaban chupete y/o tetinas de látex con eccema atópico grave y rebelde a la eliminación de otros alergenos.
- Éstos presentan PRICK TEST positivo y/o detección de inmunoglobulina E específica frente al látex.
- Generalmente la sensibilidad al látex mediante el uso de chupetes se produce desde la primera infancia, y por tanto se deberá tener en cuenta ante la aparición de eccema, urticaria o anafilaxia en un lactante.
*Alteraciones del sueño.
- Los niños que se succionan el pulgar u otro objeto confortante, se despiertan menos durante la noche.
- Las pérdidas frecuentes del chupete durante la noche crean irritabilidad en el pequeño y alteran su descanso.
- Mayor incidencia de uso del chupete en los niños roncadores.
- No iniciar con el chupete antes de los 15 días de vida, restringirlo a partir de los 8 meses y suprimirlo al año.
- Utilizar solamente los chupetes que cumplan las normas de seguridad.
- Mantener una rigurosa higiene del chupete para evitar posibles infecciones bucodentarias.