NADAR CON BEBÉS Y NIÑOS PEQUEÑOS

AUTORA: BÁRBARA AHR.

EDITORIAL: PAIDOTRIBO.

NATACIÓN PARA BEBÉS:

-         El bebé puede comenzar sus clases de natación a partir de la sexta o séptima semana de vida.

-         Durante el primer año de vida del bebé, es el mejor momento para que aprenda a sumergirse y desenvolverse en el medio acuático (sin tragar agua), ya que aún conserva el reflejo de glotis.

-         Es muy importante que el bebé tenga en el agua objetos para observar y jugar.

-         Antes de sumergirlo en el agua, hacer una toma de contacto, mojándole las piernas o alguna parte del cuerpo.

-         Enseñar al niño a rodar desde el borde de la piscina para fomentar su auto salvación.

-         Al sumergirlos en el agua, los bebés por si solos son capaces de flotar.

-         Los padres deben demostrar confianza ante sus pequeños, nunca miedo.

-         No forzar al niño a que se sumerja.

-          No se debe perder nunca el contacto visual del adulto hacia el bebé.

-         Después de cada deslizamiento, elogiar al bebé.

-         Mantener siempre un contacto físico con el bebé, dándole masajes, acariciándole, presionando la planta de los pies, etc.

-         Algunos bebés entran en un período de estancamiento, por ello  los padres deben  ayudar a superarlo, con mucha paciencia y comprensión, realizando ejercicios ya aprendidos.

-         No existen límites para  la creatividad en esta actividad, por ello los padres deben hacer todo lo posible por divertirse con sus hijos.

NATACIÓN PARA NIÑOS PEQUEÑOS:

-         La relación madre-hijo es muy importante, ya que se estimula intensamente el contacto corporal, la experimentación y la relajación conjuntas.

-         Es importantísimo que el agua de las piscinas esté tratada correctamente de temperatura, cloro, etc., de manera que no contenga gérmenes y neutralice la  orina de los pequeños. 

-         La musculatura del niño de refuerza, se fortalece la tenacidad y el endurecimiento, se estimula la respiración y se ejercitan las articulaciones y columna vertebral.

-         Los niños que tengan miedo, deberán mantenerse en un principio en contacto con el cuerpo de la madre o padre, y nunca dejarlos sueltos de momento.

-         Es aconsejable en niños menores de un año de edad, utilizar flotadores de cintura.

-         Poco a poco reducir el aire de los flotadores, hasta que 

nade libremente.

-         Un ejercicio necesario es enseñar al niño a rodar desde el borde de la piscina, para que no sufra pánico, y sea capaz de controlar un objetivo.

-         Un juego que les gusta mucho es que le arrastren de los pies sus papás.

-         Antes de sumergir al niño se puede aplicar la técnica del oleaje, de manera que se incite al niño a cerrar la boca para que no trague agua.

NADAR CON BEBÉS Y NIÑOS PEQUEÑOS:

PRIMERA PARTE: Objetivo de la natación para bebés.

-         Se trata de utilizar la estimulación al movimiento que sólo el agua ofrece al niño y al mismo tiempo agotar las posibilidades de contacto y abertura derivadas de la relación y el movimiento.

-         Los niños que han realizado la natación desde bebés son más inteligentes.

-         Se ajustan con mayor rapidez a las situaciones cambiantes, son más fáciles de motivar para el trabajo, se concentran durante más tiempo e incluso resuelven los test de inteligencia con mayor éxito.

-         Mediante el entrenamiento precoz se fortalecen los músculos y se reduce el exceso de tejido adiposo.

-         Los niños que practican la natación están más adelantados  en lo que se refiere al sistema motor.

-         La duración de la estancia en el baño será mayor progresivamente.

-         Los niños que sufran micosis deben renunciar temporalmente a la natación.

PRIMERA HORA:

-         Al comienzo, sentarse con el bebé en el borde de la piscina para observar, ya que necesita un tiempo de habituación del espacio.

-         Acaricie a su hijo en el agua, hazle mover las piernas y brazos progresivamente.

 SEGUNDA HORA:

-         Tener juguetes en la piscina.

-         Anímelo a zambullirse en el agua, pero sin forzarlo.

-         La mamá debe sumergirse en el agua, ya que los niños abren los ojos debajo de ella.

TERCERA HORA:

-         Con un flotador el niño notará la sensación de equilibrio por sí mismo, pero sin que se acostumbre a él.

CUARTA HORA:

-         Al principio, el bebé debe ser impulsado por el compañero de salida hacia el otro de llegada, que le esperará con los brazos extendidos.

-         Elogiar al bebé cada vez que llegue a usted.

QUINTA HORA:

-         Sostenerlo por las axilas y dejarlo rodar hasta el agua, les gusta mucho.

-         Rodar desde el borde de la piscina, como medio de auto salvación.

SEXTA HORA:

-         En el borde de la piscina el pequeño se sentirá seguro y le  gustará trepar por ella, descender, etc.

-         Los bebés comprueban hasta donde son capaces de sumergirse, volviendo a subir sin ayuda.

-         Coger al niño por detrás, de la zona de las caderas.

SÉPTIMA HORA:

-         Cuando el bebé recorra largas distancias bajo el agua, los padres tienen que estar pendientes.

-         Mantener en todo momento el contacto visual con el pequeño.

-         Elogiarlo en todos sus actos.

-         Cuando el niño se sumerge largas distancias el padre o madre debe acompañarlo.

OCTAVA HORA:

-         Cuando su posición es de espaldas, los niños se muestran pasivos.

-         Prefieren la posición abdominal, es más cómodo y relajante, efectúan más movimientos y giros.

NOVENA HORA:

-         Después de la octava hora el niño presenta desgana y estancamiento, por ello es bueno motivarlo.

-         El hilo conductor debe ser: ejercitar-jugar-elogiar.

-         Se produce una reorganización profunda de todo el depósito vital-mental.

-         Para superar el periodo de estancamiento hay que repetir lo aprendido.

DÉCIMA HORA:

-         Hay que proporcionarle nuevas expectativas.

-         En  este momento el niño ya ha adquirido un mejor sentido de equilibrio.

-         El tiempo máximo sumergido es de 5segundos.

SEGUNDA PARTE: Natación para niños pequeños:

-         Les resulta muy interesante y entretenido hacer ruidos con la boca, como burbujear.

-         Las guerras de agua son muy motivadoras para los niños.

-         La duración de los ejercicios de natación no debe superar la mitad del tiempo del baño.

-         Pronto el niño aprenderá a extender brazos y piernas, para alcanzar con mayor rapidez los objetos deseados.

-         Dejar que el niño se lance a los brazos de la mamá desde el borde de la piscina.

-         Los palos de natación son muy útiles para la natación del niño, pero a veces pueden ser peligrosos y causar daños.

-         Los padres deben arrastrar al pequeño por toda la piscina, les es muy gratificante.

-         Coger los pies y empujarlos lejos, dosificando el impulso hacia atrás.

-         Los niños que ya han practicado la natación para bebé actúan con mayor rapidez.

-         La respiración es un elemento esencial en la natación, hay que enseñarlo lo antes posible.

-         Hacer al pequeño girar en círculos.

EJERCICIOS QUE PUEDEN INTERCALARSE:

-         Las regaderas de plástico son un juguete muy apreciado y puede utilizarse de muchas maneras.

-         Lanzar al niño sin sumergirlo.

-         Colocar al niño sobre el abdomen o de espaldas en la estera, va muy bien para el sentido del equilibrio.