ARTÍCULO: LA NATACIÓN

 

PUBLICADO EN “CONSUMER.ES”                                                      23/04/07

 

IDEAS

-         Desde las escuelas de natación, tratan de enseñar a los bebés a flotar en posición dorsal. Además, si recordamos hasta el tercer o cuarto mes de vida, el bebé mantiene de manera natural el reflejo de la glotis, que le permite mantener cerradas las vías respiratorias, y por tanto le ayuda a adquirir mejor las técnicas de flotación.

-         Es importante que nos adaptemos al medio acuático desde edades muy tempranas, por eso, los primeros baños deben ser aprovechados por los padres y familiares, para que el crío pierda el miedo al agua.

-         La mayoría de los médicos aseguran que no es hasta los cuatros años cuando los bebés están listos para adquirir las técnicas de flotación, pues no es hasta entonces, cuando su aparato locomotor está lo suficientemente maduro para aprender a nadar. Sin embargo, otros especialistas afirman que el bebé puede aprender a flotar con tan solo un mes de vida.

-         En relación con las instalaciones acuáticas, éstas deben reunir todas las condiciones de seguridad y calidad del agua, por lo que no hay ningún problema para apuntar al niño a natación antes de los dos años, salvo que tenga algún  problema para regular la temperatura (infecciones de oído). En este caso, el bebé debe acudir cuando esté lo suficientemente maduro.

-         La temperatura del agua debe mantenerse a unos 30ºC, la profundidad no debe superar el metro, hay que procurar que los padres hagan pie para poder reaccionar ante cualquier contratiempo,  y es imprescindible que haya socorristas y monitores cerca de los niños.

-         Muchos de los especialistas, coinciden en que hasta los cuatro años, el niño no está listo para coordinar el movimiento respiratorio, que sólo aprende a tener equilibrio orientación y control corporal, así como, rendimiento muscular y movilidad.

-         Entre sus principales ventajas, destacamos sin duda, la relación afectiva que se establece entre padres e hijos. El  acompañamiento de los padres en la sesión, ayuda a trasmitir al progenitor tranquilidad, calma, haciendo que éste pierda el miedo al agua.

-         Del mismo modo, la natación ayuda a los bebés a ir despertando sus propias sensaciones, al tiempo que desarrolla habilidades como sentarse o gatear.

-         Los niños con problemas de parálisis cerebral, problemas de espalda o síndrome de Down, también se ven muy favorecidos con la práctica natatoria.

-         La natación beneficia la movilidad intestinal e incrementa el apetito, además de favorecer la eliminación de mucosidades.

-         En la actividad natatoria, están inmersas las capacidades de placer, experiencia, juego etc., consiguiendo un correcto esquema corporal, ya que el bebé se siente protegido en el medio acuático.

-         Entre las contradicciones que pueden surgir en  la práctica de la  natación, podemos destacar la hiperhidratación, la conjuntivitis, la aparición de hongos y las diarreas.

-         La Matronatación, se define como la enseñanza de la natación en los bebés de corta edad. Esta edad está en función de la madurez del  niño.

-         Desde la Asociación Española de Pediatría, se asegura que no existen evidencias del desarrollo o empeoramiento del asma por acudir a clases de natación, siempre y cuando, la cloración del agua y la aireación de las instalaciones sean las adecuadas.

-         Los programas acuáticos deben reunir información acerca de las limitaciones, riesgos, estrategias de prevención... de la práctica natatoria, así como el papel que deben jugar los padres tanto dentro como fuera del agua.

RESUMEN

            La práctica natatoria es una de las mejores actividades motrices que podemos desarrollar a lo largo de nuestra vida, sobre todo en los primeros años.

            Muchos expertos, coinciden en que no es hasta los cuatro años cuando los niños adquieren las técnicas de flotación, pues hasta entonces su aparato locomotor no está lo suficientemente desarrollado, pero gracias a la taponación de las vías respiratorias, por medio del reflejo de la glotis, estas técnicas pueden ser adquiridas a edades más tempranas. Las condiciones del agua y del entorno, deben estar en perfecto estado, para así poder prevenir la mayor cantidad de enfermedades que pueden desarrollarse en el niño. De este modo, el bebé puede comenzar a nadar a los pocos meses de vida, sintiéndose él, el protagonista del medio acuático.

            El vinculo afectivo que se produce entre padres e hijos es “brutal”, así como el desarrollo motor del que se ve beneficiado el bebé. Experiencias, juego, placer... son algunas de las sensaciones que se producen en el crío, consiguiendo un correcto equilibrio, control corporal y una adecuada orientación.

            Entre las principales ventajas que nos ofrece la natación, podemos destacar el beneficio de la movilidad intestinal, sensación de apetito, expulsión de mucosidades y rendimiento muscular. Como inconvenientes, la aparición de conjuntivitis, diarreas, hongos.

            Recordar que la natación es buena para personas discapacitadas, que no favorece el empeoramiento de ciertas enfermedades, como el asma, y que los padres deben estar informados adecuadamente de los beneficios y prejuicios que pueden desencadenarse con la práctica de la natación.

 

REFLEXIÓN

            Este artículo trata fundamentalmente de los beneficios que puede producir la práctica de la natación en los bebés.

            Es un artículo bastante interesante, pues en él se nos explica las ventajas de las que pueden verse beneficiados tanto padres como hijos con la natación.

            El bebé ha estado en contacto con el medio acuático durante los meses de gestación, de ahí  la importancia de no perder ese contacto, pues ayuda al desenvolvimiento físico y emocional. Yo destacaría principalmente, el vínculo afectivo que se produce entre los bebés y los padres, por eso le diría a todos ellos que acompañen a sus hijos a todas las sesiones.

            Igual que yo he leído este artículo, aconsejo a todos los padres y madres que lo hagan, y que “descubran”, por ellos mismos, las grandes capacidades que puede adquirir su hijo con la natación, no sólo a nivel afectivo, sino locomotor, motriz...

            La verdad, es que me ha parecido un artículo muy curioso e importante, el cual me ha aportado muchos conceptos e ideas acerca de esta actividad, pues desconocía totalmen